Artemisa blog

De ladrillos viejos  llevo los recuerdos Eregidos en un campo de difuntos que servirán de alimento al olvido. De aquella espada de diamante pulido Unas veces de hielo Y otras de caricias de algodón  del peor acero. El amor se da  pero no se mendiga, no se mendiga... Miro hacia el cielo y  entre pensamientos  me digo el tiempo es una vela que se va consumiendo  Lo que hoy sembramos  mañana lo recogemos. El amor se da  a quien lo cultiva. La crueldad habitó su cuerpo fe frío y amarga hiel fueron sus besos Sus silencios infligidos cómo castigo de aquel tiempo  dónde me sentí pequeña y presa de un lobo  de colmillos fríos. Su indiferencia dejó partir un río de lágrimas, que desemboca en el mar de los  anhelos La beldad contenía veneno. Fui la mariposa que creyó estar protegida en la urdimbre fina de su tela de araña. El amor,es alegría si hay dolor, No mires atrás  ¡CORRE DATE a la huida! Su iniquidad corrompió la dulzura que creí tierna, pero no era suya sino mía, mía... Cómo

¿Dónde van los viejos? Quizá en su letanía, se los tragó el tiempo.   La memoria se perdió, se deshizo la costura de los zurcidos,  que hizo el sol y el viento.  ¿Dónde están los viejos? Nadie ya se detiene  a escuchar sus historias, ni sus cuentos. Son voces ,que se enterraron en el desierto, en las dunas del olvido y allí vagan entre los muertos. ¡Vamos abuela!,¡ date prisa! ¡que pierdo el tren!, ¡camina! Dónde están los viejos? Nunca se fueron.  Estuvieron siempre, como los rayos del sol, en un cálido día de enero. Se abrocha vacilante  su abrigo en invierno, mientras camina, sin prisa, sintiendo que el tiempo, cuelga su traje  en una repisa. El es aquel hombre; el mismo que empuñó un arma, y los que se enamoraron  y los que perdieron a su único amor  que será eterno. Los que sacaron adelante  una prole,con una mano atrás y otra orando a Dios, para seguir  en las plegarias de la misa de alguien. ¿Cuánto valen  dos fardos de harina, en una vasija? ,¿si no hay hambre? ¿Dónde están lo

No, no estoy bien hoy. Esta noche se me antoja larga , pesada, densa, en una ciénaga donde se acumulan pesares lejanos, recuerdos vívidos,  de un cajón llamado olvido Donde mi vida se queda rebozada en ese fango,del que siempre salgo, siempre puedo, pero esta noche  no quiero poder, me rebozo  en el lodo, sucio, pringoso, feo,  y lo veo con cansancio, con hastío... Fuerte, eres fuerte, siempre fuerte. Esta noche se me antoja densa,  soledad inmensa, de losa, de piedra dura, donde me siento yo,  donde me comprendo yo. Triste, vagabunda de lodo  y cansancio de camino y hastío Me lo permito, me lo regalo Fuerte ,no siempre,  aveces patio triste, yerto de abrazos y frío de besos y lazos.