Artemisa blog

En mi mundo único, nadando con mis emociones. En un rincón de mis entrañas, se incendiaron  con tú  fósforo, mis lágrimas,  convertidas ya en cenizas, de aquel coloso de mis creencias. Del amor, que en tu ayuda corrió para protegerte de tus propias heridas, _mi sentido de protección y yo! Las hermanas que sentí  que por amor estaban  unidas, eran sólo una ilusión. Vano, lloro tu partida sabiendo de tu mente confundida. El sentir de mis campanas tañen en este día sólo para mí. En este día oscuro, cantan los muertos. El duelo,de una relación que vi partir. En la imagen turbia, en el tiempo ,que el ego dibuja, se mece un mar teñido de negro y  lleno de olas. Violento en su rugir. Pasaste por alto la inmensidad  y el brillo, que tenía yo, por ti, hermana.  Tu desgarro, atravesó todo lo vivido, como si se tratara  de correr delante  de un monstruo despavorido. Y el monstruo fuera yo,yo. Por tu mente detenida, Asustada, en un lugar de un tiempo remoto, donde andábamos de niñas, j

Los poetas son supervivientes del asfalto de las calles. Pueden apreciar, en la simpleza de una forma un instante, un lugar, y transformarlo en palabras, en verso ,con la misma belleza que una simple hoja de otoño, tiene al caer y en mitad de su duelo, teñir de colores el suelo. En el desgarro de las tripas, hay un lugar, donde el dolor sale y se convirtió en delicada rima.